miércoles, 5 de marzo de 2008

Esa cosa que tiene un nombre

Soltarlo, dejarlo ir, huir, volar, escapar.
ver como se aleja, y querer que vuelva.
Verlo caer e intentar salvarlo.
Sentir su movimiento y querer detenerlo.

Sabemos que una vez que se va ya no depende de nosotros su regreso,
y que si vuelve ya no es el mismo que se fue.

Conocemos cada uno de sus pasos,
pero no podemos imaginar por donde habrá andado durante su ausencia.
Sabemos cada uno de sus pensamientos,
pero no logramos explicarnos por que se fue.
Conocemos todos sus gustos y preferencias,
pero no divisamos el lugar en el que busco refugio.
Sólo sabemos que cuando tiene que irse, simplemente se va... y cuando tiene que regresar, vuelve...
y es ese el momento en el que todo es tan distinto.



Escrito y dibujado, por mi!